En los últimos días vivimos una de las imágenes que nos retrata de manera única, incontrastable, en como se maneja la pandemia y la forma asincronica y cruel de nuestra #Cuarentena.
Entre las victimas de clase B, dado que se ha decidido que las únicas son las de #CoVid, está la gente que no ha poddio despedir a ssu familiares, a sus seres queridos moribundos. Un par de casos ilustran el absurdo de la norma por encima de la empatia y la humanidad. En San Luis 2 hijas pidieron 10 veces el ingreso a la provincia asi como su padre #MartinGaray, sin éxito, pero al mismo personal sanitario se reunió en una fiesta, sin importar ahi, las condicones de aislamiento, ya que el objetivo no es sanitario.
Varios otros casos, que nos cuentan todos los días, mientras los informadores relatan la crueldad real de la epidemia, deciden que deben seguir el discurso que decide que es correcto pensar y que no.
Que queda si no se puede despedir a un padre moribundo, a una hija como en el caso Solange?
Escribi una nota sobre el tema en @infobae que comparto. Nota
En todas las culturas hay algun ritual que significa «despedida» de un ser querido. Es tremendo lo que trajo esta epidemia en relacion al duelo… gracias enrique!