Hace unas semanas escribía en la nota
VIOLENCIA SOCIAL COMO ENFERMEDAD METASTÁSICA,
sobre la situación de conmoción social en la cuál vamos porgresivamente deslizándonos hacia un lugar oscuro y con  consecuencias insosopechadas en su magnitud pero mconcidas y con ejemplos en toda la historia y en todas partes del mundo.
El homiciod de un chofer de colectivos (buses) en el conurbano bonaerense, La Matanza, llevó a un grado de indignación a sus colegas pero a todos quienes padecen en particualr en ciertas zonas, el riesgo diario de vivir con miedo.

Al llegar a la zona el Ministro de Seguridad de la provincia  Sergio Berni, fue interpelado para ser luego agredido. Muchos justificaron la vilencia, alegando lo obvio, el hastío de las víctimas, sin embargo la violencia nose apaga con más violencia.

Respecto a esto escribí una nota en MendozaOnline (@mdzol)

Crimen del colectivero: violencia anómica y sin nombres

 

El Dios Kaos (Chaos) ilustra la nota, y es quien aparece en medio de la anomia cuando desaparece la norma cultural

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